Ciencia

Una alta concentración de CO2 en la atmósfera empobrece los cultivos de arroz

lunes, 13 de marzo de 2023


Cultivo arroz (Foto La Unión Extremadura)


Una alta concentración de CO2 en la atmósfera reduce más de un 20% la disponibilidad de fósforo, un nutriente indispensable para que el terreno sea fértil, en cultivos de arroz, según un estudio en el que ha participado el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF).


Según la investigación, que publica la revista 'Nature Geoscience' y en la que han intervenido especialistas de Australia, España, Canadá, EE.UU, Francia y China, el 55 % de los arrozales experimentará mayor riesgo de reducción de rendimiento debido a la deficiencia de fósforo, especialmente en China e India.


Además, los investigadores recuerdan que el 70% de las reservas mundiales de fósforo se encuentra en Marruecos y en el Sáhara Occidental, lo que abre un reto geopolítico por la dificultad de países con menor poder adquisitivo de fertilizar las tierras de cultivo con suplementos de este mineral.


El investigador del CREAF y del CSIC Josep Peñuelas ha explicado que "la elevada concentración de CO2 en la atmósfera es un arma de doble filo, porque tiene efectos en la seguridad alimentaria y en la emergencia climática mundiales".


Los investigadores han estudiado arrozales en condiciones de elevado dióxido de carbono y han visto que el 55 % de las grandes extensiones de arrozales de China e India experimentarán mayor riesgo de reducción de rendimiento debido a la deficiencia de fósforo.


En términos relativos, los países de renta baja (aparte de China e India, los ubicados en el Sur Este asiático, Centro América, Sur América, África y Oriente Próximo) experimentarán "situaciones más críticas".


En ese sentido indica que se prevé que el 70 % de los arrozales sufrirán mayores riesgos de reducción del rendimiento, frente al 52 % en los países de renta media y alta, según Peñuelas.


El trabajo ha puesto en evidencia una contradicción: si bien el CO2 atmosférico es la principal fuente de carbono para los cultivos, su elevada concentración en la atmósfera limita a largo plazo la presencia del fósforo fertilizante en el suelo, un mineral esencial para el metabolismo y crecimiento vegetal de suelos agrícolas.


Para Peñuelas, "las plantas aprovechan a corto plazo el efecto fertilizante de la alta concentración de CO2 en la atmósfera, pero a largo plazo, los cultivos de arroz dejan de disponer de fósforo y el suelo se empobrece, por lo que el crecimiento de las plantas queda comprometido".


Como consecuencia, según los investigadores, esto compromete la seguridad alimentaria en un contexto de crecimiento mundial de población donde el arroz desempeña un papel primordial.


UN RETO MUNDIAL


Según el CREAF, el fertilizante químico de fósforo está distribuido desigualmente en el mundo y se elabora a partir de fosfato de roca, un recurso no renovable.


El 70 % de sus reservas se encuentran en Marruecos y en el Sáhara Occidental y muchos países dependen de las importaciones para disponer de ellas, por lo que su déficit sostenido puede provocar un rendimiento agrícola limitado a determinadas regiones del mundo.


Además, esta situación puede agravarse en el futuro dado el continuo aumento de los niveles de CO2 atmosférico, que limitan la presencia de fósforo.


"Es evidente y preocupante la dificultad de países con menor poder adquisitivo para fertilizar las tierras de cultivo con suplementos de fósforo", ha apuntado Peñuelas.


Ha recordado que durante la crisis alimentaria mundial de 2007-2008, el precio de la roca fosfórica y los fertilizantes aumentó un 400 % en 14 meses y que este aumento de precio también se ha producido en 2022


Como alternativa, los científicos plantean planificar estrategias internacionales de gestión del fósforo que tengan en cuenta los futuros cambios globales. 

PUBLICIDAD

SUSCRÍBETE A LA NEWSLETTER

ESTUDIO

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD