La superficie de cultivos ecológicos en Aragón ha aumentado casi un 50% en dos años

La superficie dedicada a la agricultura ecológica ha crecido un 48% en Aragón en apenas dos años. En 2020, la Comunidad contabilizaba 72.000 hectáreas, mientras que en 2022 rozaba las 107.000. También los agricultores y ganaderos dedicados a la producción ecológica han aumentado, pasando de 1.100 a 1.700 desde la pandemia. Una tendencia que tiene su reflejo en el aumento de los consumidores que optan por esta opción en su alimentación.

Por provincias, Zaragoza es la que acumula un mayor número de hectáreas ecológicas, un total de 60.000; seguida de Teruel, con 37.000, y Huesca, que contabiliza menos de 10.000, según Aragón Ecológico.

Producir en ecológico obliga a respetar unas normas de juego muy específicas desde el primer eslabón de la cadena. Así, deben utilizarse determinadas técnicas -como mallas o sistemas a base de feromonas para frenar el ataque de algunas plagas- para poder superar con éxito las auditorías que se realizan cada año.

Victorio Catalán pertenece al grupo de agricultores Saltamontes Bio y recuerda que no se debe utilizar productos químicos. Además, los auditores se trasladan a las fincas y toman muestras de manera aleatoria para descartar la presencia de sustancias químicas: "No podemos quemar y nos obligan echar algún tipo de abono orgánico para mejorar el suelo", explica. 

Control en la distribución y venta

No obstante, el examen no termina allí. Para poder obtener el sello que garantiza la procedencia de la agricultura ecológica, la distribución y la venta también están sometidas a controles. Por ejemplo, Miguel Ángel Armengod en su granja de Villel, en Teruel, tiene que sellar diariamente 40 docenas de huevos, que después distribuye en furgonetas isotérmicas. "Llevan una serie de números. El primero tiene que ser el cero, luego lleva el número del país, la provincia y el número de explotaciones. La principal característica para el cliente es cuando lo cascas. No tiene color porque está prohibido echar colorantes en ecológico".

El Comité de Agricultura Ecológica es el responsable en Aragón de controlar el proceso hasta obtener el sello, que es aval de respeto y cuidado del medio ambiente, pero también de que este tipo de productos son de calidad. "Nos ponemos restricciones a la hora de producir para que esa calidad sea mejor, como hacen las denominaciones de origen o las indicaciones geográficas protegidas", explica el gerente de la organización, Pedro Fatás. Todo para que llegue a la mesa un producto de calidad garantizada.